
Los dados habituales son cubos pequeños, de entre 8 y 25 mm de arista, y cuyas caras están numeradas de 1 a 6 (normalmente mediante disposiciones de puntos), de tal manera que las caras opuestas suman 7 puntos. Hay entonces dos configuraciones posibles: una tiene los números 1, 2 y 3 convergiendo en un vértice en el sentido de las agujas del reloj, y la otra en sentido contrario.
Desde dos caras, como una tabla, hasta los dodecaedros (doce caras) pasando por todos los intermedios; y hechos con toda clase de materia prima. Así los vemos de semillas, piedras comunes, huesos, madera, marfil, bronce, ágata, mármol, cristal de roca, alabastro, porcelana, etc. Y en sus caras se han visto esculpidas, labradas o pintadas, toda suerte de imágenes, figuras y símbolos.
Objetivos a conseguir:
Desde dos caras, como una tabla, hasta los dodecaedros (doce caras) pasando por todos los intermedios; y hechos con toda clase de materia prima. Así los vemos de semillas, piedras comunes, huesos, madera, marfil, bronce, ágata, mármol, cristal de roca, alabastro, porcelana, etc. Y en sus caras se han visto esculpidas, labradas o pintadas, toda suerte de imágenes, figuras y símbolos.
Objetivos a conseguir:
- Obtener experimentos aleatorios
- Obtener los números enteros ( positivos y negativos)
- Realizar sumas y restas con enteros.
- Iniciar el cálculo de probabilidades.